sábado, 26 de enero de 2019

Neurozapping. 17) Mujeres desesperadas y su síndrome

Mujeres desesperadas es una serie cómica basada en los dramas de cuatro amigas.
Cuenta la leyenda que el creador se inspiró en una noticia brutal, madre que ahoga a sus cinco hijos por que pudo con su situación. Esa situación desesperada no la llegaba a comprender mientras que su madre le indicó que ella sí se imaginaba la situación de la madre. Se ve que eso le hizo pensar y se le ocurrió la idea.

La exitosa serie consiguió llegar a 203 países y que su primer episodio lo viesen 21 millones de personas recibiendo multitud de premios.

He visto unos cuantos capítulos y me gustaba pero realmente era mi mujer la que disfrutaba con la serie. Eso dice mucho en favor de la misma, no por mi falta de criterio (que podría valorarse), sino por conectar más con las mujeres a las que muestra en situaciones extremas pero no lejos de la realidad.

El desarrollo de los capítulos se centra en un barrio donde las protagonistas son vecinas. Vemos los problemas dentro y fuera de las casas, dentro y fuera de las familias y en sus interacciones.

Son una serie de mujeres diferentes pero que intentan parecer perfectas a las otras. Intentan parecer más jóvenes, alcanzar sueños, tener una vida familiar maravillosa. El inevitable conflicto con la realidad las estresa y genera sensación de fracaso.
Esa situación se produce en la vida real y ha recibido el coyuntural nombre de síndrome de la mujeres desesperadas caracterizada por generar sentimientos de irritabilidad y ansiedad.



Leemos que la modernización de la vida de las mujeres asumiendo un papel más igualado con el hombre en la sociedad fuera de casa no se trasmite dentro. Las tareas del hogar siguen recayendo mayoritariamente en ellas.

Está muy claro que el cambio social va más lento dentro de la mayoría de las casas. Tradicionalmente las mujeres han realizado los quehaceres domésticos y el hombre va participando, compartiendo y responsabilizándose cada vez más. Sin embargo es habitual que muchas mujeres asuman como suyas más tareas y que los hombres no luchen por conseguir la igualdad en este campo.

Los hombres también somos expertos en inhibirnos en situaciones complicadas y dejar que se arreglen solas y no hablemos de una paciencia casi infinita comparada con la de una mujer antes de actuar.
La consecuencia de esa acumulación de trabajo y responsabilidades en algunas mujeres las puede llevar a mostrar los signos que definen el síndrome: llorar, gritar a los niños agresión a la pareja, sumirse en depresiones y hasta ponerse normas demasiado estrictas.
Compartir los problemas con la pareja, dejarse ayudar y delegar pueden llegar a verlo como un fracaso porque no hayan podido manejar la situación.

A eso añadimos la nueva obsesión de mujeres (y cada vez más hombres) por tener un cuerpo maravilloso a una edad cada vez mayor. No solo los esfuerzos por lograrlo sino valorarlo como algo importante para ser feliz nos puede hacer perder autoestima.

Parece que las mujeres que sufren el síndrome ya comenzaron en la adolescencia con los primeros síntomas y con la llegada de los problemas de pareja, profesionales, familiares y hasta el síndrome del nido vacío terminan por desarrollarlo plenamente.

En definitiva existe un problema entre la imagen ideal de la mujer en la sociedad y la real. Las mujeres con sobrepeso están estigmatizadas o son invisibles mientras que los gorditos no tenemos problemas en lucir la curva de la felicidad.

José Ramón indica que no solo el machismo tiene la culpa ya que las revista de mujeres y para mujeres valoran precisamente el modelo de mujer perfecta.
La sociedad parece mostrarnos que siempre se puede tener más dinero y estar más delgado.

La propuesta de debate está totalmente en línea con el capítulo aunque ya conocéis mis líneas:

- Las mujeres asumen más tareas porque siempre se ha hecho así y los hombres son más vagos. ¿De quién es la culpa?

- La sociedad nos marca los prototipos de mujeres y hombres ideales pero si no les haces caso,  ¿los demás te miran raro? o ¿eres tú quien piensa que te miran de otra forma?

- Si a todo lo que tienes que llevar adelante le añades querer estar físicamente como algún/a modelo es muy posible que no te dé la vida. Ir a hacer deporte y comer poco frente a sentarte a comer relajado y disfrutar de ese momento es una decisión dura. Si finalmente logran modificarnos genéticamente y que no engordemos, ¿crees que se haría menos deporte?

Feliz semana


10 comentarios:

  1. Buenas cuestiones para el debate, se abre la polémica.

    ¿De quién es la culpa? NO CONTESTO
    Pero voy a decir una cosilla, si estoy sentado con mujeres (y lo suelo estar) y alguna comenta lo poco que hace su pareja, yo callo; si comenta que vaya una mierda, que tiene que trabajar mucho más que él, yo callo; si le echa la culpa a él, yo callo; pero si dice que los hombres son así, yo salto, y, aunque no le pregunto (porque me parece un golpe bajo a una persona que está sufriendo) "¿quién te obliga a estar con él?", si que le digo que yo en mi casa hago cosas y que no me imagino a mi mujer diciendo eso. Muchas veces, como están quemadas saltan y me atacan, entonces les relato lo que yo hago y las circunstancias que imperan en mi familia... no suelen atacarme después. Si alguna quiere guerra después de ello, posiblemente pierdo los papeles, XD.
    Nota anexa: no entiendo los razonamientos basados en el amor. Si estás con alguien es porque quieres, el amor te puede hacer que momentáneamente te dejes llevar, pero tienes un problema si no eres capaz de controlar emociones que te conducen sentimientos negativos y/o al dolor.

    - Esta si la tengo clara, los demás te miran raro. Porque mentir, yo mismo miro raro algunos look. Vemos, queramos o no, estamos influidos por la sociedad, eso no es un problema, lo que es un problema son los extremos. Si alguien sufre porque le gusta un determinado look y no soporta que a otros les parezca como mínimo curioso, tiene un problema; si alguien necesita gustar a la gente más que a uno mismo, tiene un problema; si alguien se rebela hasta tal punto que hace justo lo contrario de los prototipos sin pensárselo dos veces, tiene un problema...
    Debemos de aceptar que somos seres sociales, debemos de vivir en una balanza entre lo social y lo individual, cualquier extremo es malo. Como nivelar la balanza es difícil, será un proceso lleno de contradicciones, cada uno lo alcanzará con una carga distinta en cada sitio. Aprendamos a respetar a la gente, pero tampoco nos infrinjamos un castigo por ver cosas raras en otros comportamientos.

    - Los que hacen deporte como viciosos seguirían haciéndolo. Pero yo creo que si consiguiéramos la salud y la belleza sin esfuerzo físico y comiendo todo lo que quisiéramos, lo haríamos. Los animales por naturaleza estamos sesgados en algunos pecados capitales (pereza y gula en este caso).
    Nota: la reflexión de Sesgos=PecadosCapitales surgió en mi cabeza después de las reflexiones de Conxi sobre que buscó en las religiones respuestas morales (al menos eso entendí yo que habías hecho, Conxi).

    Un saludo a todos, me he mojado, he puesto ejemplos, podéis atacarme, pero no llaméis a las hordas asesinas que pululan por twitter, por favor.

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  2. Hola Juan Carlos

    Cuando haces algo mal siempre buscas un excusa que será parcial si asumes que lo has hecho mal. Cuando dicen que lo hacen por amor están poniendo excusas, o ¿es que asumen que la otra persona no los quiere y por eso no ayuda más?

    De acuerdo en que tienes que gustarte a ti antes que a los demás.
    Me refería más a que al verte tú mismo diferente puede provocarte la sensación de que eres observado.

    Yo también soy guloso
    Espero a que comente Conxi


    Ventajas y desventajas de no verte la cara en twitter, puedes despotricar casi, por porcentaje, sin consecuencias

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  4. ¡Aquí estoy, Santos! XD

    Como voy a hablar de feminismo, me apetece poner por delante la definición que más me gusta de esta idea, y que hizo en su día Ángela Davis:

    "El feminismo es la idea radical que sostiene que las mujeres somos personas".

    Y me gusta porque deja claro por encima de todo lo que somos, y que es una idea radical en la mesura de que muchos hombres (sobre todo históricamente, pero de haberlos haylos en la actualidad) no nos ven como tal (sino como cuerpos a su servicio), pues para ellos no formamos parte de su grupo humano.

    Sí, somos algo diferentes a los hombres. Y no sé muy bien qué prima más en esta diferencia la biología o la cultura. Aunque lo más probable, en el caso de los humanos, es que sea una mezcla de las dos. Pero hay quienes maximizan esas diferencias de forma exagerada e irreal.

    Leí una vez que a nivel cerebral no han encontrado diferencias estadísticas entre el cerebro femenino y masculino. Y no me extraña, porque somos personas.

    Y soy de las que piensa que (aunque hemos mejorado de décadas atrás) vivimos en una sociedad patriarcal. Lo dejo claro, pues hay quien niega este hecho.

    Juan Carlos, tal vez tú (como otros) te encargas al mismo nivel de las tareas de la casa y de los niños que tu mujer. Pero estadísticamente no es lo más frecuente. Y el estrés que comporta (entre otras cosas) esta carga de trabajo, en este capítulo del libro, José Ramón dice que lo han llamado coyunturalmente el síndrome de las mujeres desesperadas. Personalmente pienso que si los hombres os vierais en la misma situación que las mujeres que se desesperan, el resultado sería el de hombres desesperados. Lo que ocurre es que la sociedad ha asignado unas responsabilidades a las mujeres y no la ha hecho con los hombres.

    En el resumen que ha hecho Santos (y que ha sacado del libro -pero como ahora no lo tengo a mano me baso en su resumen-) me ha llamado la atención que se diga “José Ramón indica que no solo el machismo tiene la culpa ya que las revista de mujeres y para mujeres valoran precisamente el modelo de mujer perfecta”. Y me choca pues las mujeres podemos ser tan machistas (o más) que cualquier hombre. Yo misma (por poner un ejemplo cercano) he tenido pensamientos machistas y estoy muy influenciada con las directrices machistas sobre el aspecto que debo tener. Es lo que tiene vivir en una sociedad patriarcal. Y las mujeres que editan esas revistas de las que habla José Ramón son machistas (al menos en el aspecto que destaca), por lo que el culpable sí que es el machismo.

    Sobre que las mujeres asumimos más tareas, pienso que es porque la sociedad nos ha educado en que es nuestra obligación y responsabilidad asumirlas, y a algunos hombres (en el mejor de los casos) les va bien esta situación y no hacen nada para revertirla.

    Somos seres sociales con unas normas y unos ideales físicos. Eso es muy difícil de cambiar. Sí, creo que los demás te discriminan (en el mejor de los casos) sutilmente, y más si eres mujer.

    Sobre la tercera cuestión, no lo sé, pero conozco alguien cercano que no engorda aunque coma una barbaridad (de hecho tiene que comer una barbaridad para no adelgazarse) y hace deporte por cuestiones de salud no relacionadas con el peso.

    ¡Que tengáis una feliz semana!

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    1. Como casi siempre, completamente de acuerdo contigo (además, me gusta tu tendencia a definir antes de debatir).

      Dos cosillas:
      - Con respecto a mi ejemplo: es estadísticamente incuestionable que las mujeres se dedican más a las tareas de casa que los hombres, por lo tanto es normal que se generalice (todos lo hacemos). También es obvio que si se generaliza, los que no cumplimos un determinado perfil (y que conste que en otros aspectos seguro que soy muy machista, no estoy echándome flores) nos sintamos molestos (aunque repito, es obvio que se generalice, es uno más de los sesgos que nos acompañan). Por esa razón, si saltan la barrera y generalizan les digo que en mi casa eso no ocurre, me parecería fuera de contexto decirles lo que más abajo intento explicar: no entiendo como alguien está con otra persona que le explota de la manera que ellas relatan que están siendo explotadas.
      Que conste que yo me quejo puntualmente de mi mujer (igual que seguro ella de mí) pero si observara que mi mujer no hace nada yo la abandonaría sin dudarlo "el tiempo de la esclavitud ha terminado". Por otro lado, creo que jamás podría estar con una mujer que se dedicara a estar a mi servicio (porque tampoco quiero a mi lado alguien que se comporte de manera sumisa).
      Nota: espero no estar cagándola con tanta explicación, porque en estos temas mientras más hablas más metes la pata. Pero alguna vez tenemos que hablarlos para ver si cambia la cosa a mejor ¿no?

      -Lo segundo es ¿qué te ha parecido la reflexión de que al menos dos de los pecados capitales son en realidad un intento de controlar sesgos -tendencias internas y naturales erróneas- por parte de las religiones?

      Poco más, un saludo

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    2. Me gusta la definición porque es corta y completa.

      Yo veo la diferencia iniciada en la biología y mantenida por la cultura. Los débiles ahora pueden prosperar sin problemas pero a las mujeres no se les dan las mismas oportunidades.
      Ahí está el techo de cristal.

      Respecto a tus dudas sobre lo que quiere decir José Ramón, lo has explicado perfectamente, es eso. He sido yo el que ha dado alguna vuelta de más.

      Confirmo que Juan Carlos se queja a veces y que en su casa se comparten muchas tareas.
      Y no la cagas, otra cosa es que hables con gente que no acepte no tener toda la razón. Ahí la cagas pero es culpa de la otra parte, huye.

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    3. Hola Juan Carlos,

      Sobre tu reflexión sobre los razonamientos basados en el amor... el mito del amor romántico hace mucho daño, sobre todo, a las mujeres. Pues, al igual que la violencia es una tendencia estadísticamente masculina (y dañina), el amor romántico es una tendencia estadísticamente femenina, que (de forma clara y llana) nos convierte en bobas. Sesgos naturales creo que los llamarías ;). El feminismo está en contra del amor romántico mitificado (y yo también).

      Simone de Beauvoir lo explica muy bien: "El día en que una mujer pueda amar, no desde su debilidad sino desde su fuerza, no para escapar de sí misma sino para encontrarse, no para rebajarse sino para afirmarse, ese día será para ella, como para los hombres, una fuente de vida y no de peligro mortal".

      Sobre tema religión: sí, lo primero que hice es buscar en las religiones respuestas morales; pero, como ya dije, me equivoqué en hacerlo. Pero lo busqué allá, no porque fuera creyente sino porque quería algún tipo de consenso.

      Me ha parecido muy original lo de relacionar nuestros sesgos naturales con los pecados capitales. Y sí que era una buena manera de controlar estas tendencias por parte de las religiones. Pero como he dicho, no estoy de acuerdo con la moral de la religión. Y aunque es cierto que los excesos (y por tanto vicios) que se describen en los pecados capitales suelen ser dañinos, sobre todo si se convierten en recurrentes y extremos, la religión los censura demasiado sin tener en cuenta que es un abuso de nuestros instintos naturales; y (por tanto) a quien llega a estos excesos que nos dañan (si es el caso) se le debe ayudar y no condenar. Además está el tema de quién juzga lo que es gula (por ejemplo). ¿El cura? Pues no hay una definición de cuándo se lo considera pecado comer demasiado: ¿un dia, una semana, un mes? Y las personas delgadas que comen una barbaridad y no se engordan, ¿esos también cometen gula? (sospecho que muchos curas dirían que sí y no estoy de acuerdo que se les censure a esas personas por ello).

      Prefiero que un médico me diga que mi dieta es perjudicial para mi salud, a que lo haga un cura. Y con el resto de pecados capitales igual (con el experto correspondiente, claro).

      Santos, completamente de acuerdo :).

      ¡Saludos!

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    4. Hola a tod@s:

      Perdonadme que no haya participado en este debate. He tenido el libro perdido en mi habitación durante dos semanas y esta serie, que he visto algunos capítulos, me producía curiosidad pero nada más, era un poco más de lo mismo.

      Estoy de acuerdo con Conxi cuando opinas sobre las revistas dirigidas a las mujeres. En casa siempre hemos sido mujeres y hemos consumido ese tipo de revistas.

      En muchas ocasiones, las mujeres son más machistas que los hombres. Os voy a poner un ejemplo que he visto en la TV el jueves. Ví la gala del "GH DUO" para ver quien era la expulsada, a veces, los celos son muy malos, pero los comportamientos machistas más. La expulsada, soltó una frase que me dejo una poco del revés y que se repite mucho: "Es que él no me protegió ni me cuido" cuando ya la pareja estaba rota. A mi entender ¿por qué un hombre te tiene que proteger y cuidar? es un poco, a mi entender, impuesto por la sociedad. Él es una buena alhaja, quizás te tienes que proteger tú de él, no él de ti. Me pareció una reflexión machista de una sociedad patriarcal.

      En el caso de JC, yo he convivido en casa compartido con hombres que se han sabido defender solos en las labores del hogar, cosa que me ha alegrado mucho verlo. Mi abuela, liberal para su época enseño a mis tíos a cocinar y hacer labores del hogar, cuando se casaron hubo mujeres que por su educación les acomodaron y les hicieron quitarse ese "mal hábito" según ellas con lo cual ellos tomaron una posición de poder no muy bien llevada porque se veía como niños malcriados. Aquí ¿quién tuvo la culpa? Él no porque ya iba enseñado sino ellas.

      En fin seguiría y seguiría, pero el tema ya ha acabado y solo he entrado a dar una pincelada del tema.

      Espero comentar el siguiente capítulo que ya me ha leído porque ¡¡¡¡ya encontré el libro !!!

      Salu2

      Anna

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  5. Buena semana a todos!! Vaya vaya!! un tema de lo más jugoso, jejejej

    Sobre la primera cuestión (también la más peliaguda), la verdad es que es muy compleja. Y la verdad es que no estoy muy formado en estos términos y conceptos como para dar una opinión. Así que prefiero ver los toros desde la barrera y seguir formándome

    En cuanto a la segunda cuestión, estoy bastante de acuerdo con lo que ha dicho Juan Carlos. A todos nos llaman la atención las cosas raras (entiéndase raro como lo opuesto a normal, y normal como equivalente a lo más frecuente). Y esto no es malo. Si veo por la calle a alguien con tres brazos, o muy feo, o muy alto o con el pelo que le llega por los tobillos, lo miraré porque llama mi atención. Mirar es gratis y no es ofensivo (y quien se ofenda por una mirada, como dice Juan Carlos, tiene un problema). Evidentemente, la cosa cambia cuando la mirada pasa a agresión (verbal o física)

    El tema de que nos sintamos mal cuando somos o parecemos diferentes creo que tiene dos causas intrincadas: La primera es que somos seres gregarios, sobrevivimos dentro de la manada/tribu/sociedad y debemos parecer como el resto de la sociedad para sentirnos parte de ella y sentirnos seguros. La segunda causa es la falta de objetivos de muchas personas. Si vivimos de cara a los demás, tendremos que ser los más guapos, los más fuertes, los más sanos, los mejores en el trabajo, los más divertidos y los más ricos (el ejemplo de Angelina Jolie en el capítulo). Una parte importante de la madurez creo que consiste en conocerse a uno y saber lo que uno quiere. Si es importante y te hace sentir bien ser divertido, harás por ser divertido y te hará menos y eso te generará una satisfacción que contrarresta la "pupita" que te pueda hacer pensar que alguien piensa de ti que eres un payaso.

    La tercera opción me ha pillado completamente desarmado. No me lo había planteado nunca y no tengo ni idea. Pero así, a bote pronto, creo que hay más motivaciones para el deporte que el aspecto físico (estoy pensando en gente que hace senderismo, jugadores de pingpong, patinaje artistico o tenistas) pero le daré un par de vueltas al asunto, jejeje

    Feliz semana everybody

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  6. Aunque entiendo vuestra idea sobre la cuestión 2 yo estaba pensando en que muchas veces somos nosotros mismos los que creemos que, al ser diferentes, se fijan en nosotros. La mayoría de la gente me mirará y pasará de mí y, si acaso, se reirá por verme distinto y me olvidará. Mientras yo puedo estar pensando en que ellos piensan en mí. Ahí sí veo un problema.
    Y no es mi caso, me pongo como ejemplo por no señalar

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