sábado, 24 de noviembre de 2018

Neurozapping. 8) CSI y la hora de la muerte

Vamos con un nuevo capítulo de Neurozapping, este caso hablamos de la datación de la muerte... y de CSI

CSI (Crime Scene Investigation) es una serie estadounidense que empezó a emitirse el 6 de octubre del año 2000 y que trataba de la resolución de crímenes y asesinatos por parte del Departamento de Criminalística de Las Vegas. Creada por Anthony E. Zuiker alcanzó hasta la decimotercera temporada y generó tres secuelas: CSI: Miami (2002-2012), CSI: Nueva York (2004-2013) y CSI: Cyber (2015-2016). Lo que viene siendo una serie de éxito que además de inspiración para otras posteriores como Bones o Mentes Criminales.

Parte importante de la resolución de un crimen, y donde Jose Ramon Alonso centra la atención del espectador a lo largo del capítulo, es la datación de la muerte. Saber recoger e interpretar la información biológica en un cadáver y estimar la "hora de la muerte" es una primera pista de utilidad para identificar posibles sospechosos y cotejar las coartadas.

En este sentido, el autor expone los tres factores fundamentales clásicos que se siguen empleando para datar la muerte, a saber:

     1. Algor mortis: Una de las funciones de la sangre es el mantenimiento de la temperatura corporal. La sangre está a 36-37ºC y su circulación continua mantiene dicha temperatura en todo el cuerpo. El cese de la circulación implica una pérdida de temperatura corporal de fuera a dentro, de forma gradual, siguiendo una curva sigmoidea. La utilidad de este método se circunscribe a las 12 primeras horas postmortem, ya que pasado ese tiempo, la temperatura del cuerpo ya iguala a la del ambiente. No obstante, hay que influencian como la temperatura exterior, peso de la persona o la inmersión en agua.


     2. Rigor mortis: Una serie de procesos químicos y la liberación de cationes divalentes de calcio en el interior de las fibras musculares como consecuencia de la muerte provocan una rigidez muscular entre 3 y 12 horas postmortem. Estas rigideces también ocurren gradualmente desde la cara hacia el torso del cadáver.
    3. Livor mortis: La presencia de livideces cadavéricas en las zonas más declives del cuerpo es otro fenómeno cadavérico clásico. El cese de la circulación sanguínea produce la sedimentación de la fase sólida de la sangre (fundamentalmente los glóbulos rojos) en las zonas más declives, empezando como algunos puntos rojos que van creciendo a partir de la primera hora.


En una segunda parte, Jose Ramón Alonso habla sobre el neuroepitelio o epitelio olfatorio que se encuentra en el techo de las fosas nasales. Una de las características más especiales de estas neuronas es que son células nerviosas que, a pesar de su alto grado de especialización, son continuamente renovadas y reemplazadas por células madre (recordemos que las neuronas perdidas no se suelen reemplazar, por lo que esta propiedad, hace de estas unas neuronas especiales)

La otra gran característica es que al estar tan expuestas al exterior, las células olfatorias que actúan como neuronas, no necesitan una gran oxigenación a partir de los vasos sanguíneos (reciben oxígeno directamente del aire) y, de hecho, su vascularización no es muy profusa. Esto hace que, en caso de falta de riego sanguíneo, estas células no mueren rápidamente por hipoxia (falta de oxígeno), sino que tardarán más en morir debido a la falta de nutrientes.

Esto, unido al hecho de que estas células presentan una serie de cilios (proyecciones celulares hacia el exterior con capacidad de movimiento activo) en constante movimiento, viene a constituir un nuevo mecanismo de datación de la muerte. Los cilios se mueven para impulsar la secreción mucosa en el interior de las fosas nasales. Tras la muerte, debido al aporte directo de oxígeno, estas células permanecen vivas (y sus cilios en movimiento) incluso tras 20 horas después de la muerte. 

La detención de los cilios también es progresiva según una curva similar a la del enfriamiento cadavérico. Sin embargo, este proceso es menos influenciable por factores ambientales, sexo u otros datos personales.

La datación de la muerte cuando ha pasado más tiempo ya depende de otros fenómenos como el estadio de putrefacción o los insectos que se pueden encontrar sobre el cadáver.
Falk, Nathalie & Lösl, Marlene & Schröder, Nadja & Gießl, Andreas. (2015). Specialized Cilia in Mammalian Sensory Systems. Cells. 4. 500-519. 10.3390/cells4030500. 

En resumen, la datación de la muerte es algo complejo, que depende de muchos fenómenos y nunca es exacto. Por ello, la Ciencia Forense, trata siempre de encontrar nuevos mecanismos para determinar el intervalo de tiempo entre el momento 0 (la hora de la muerte) y el momento actual.

Sin embargo, me llama mucho la atención la definición del "momento 0" y me gustaría centrar por aquí el debate:

¿Cuándo morimos? ¿Qué es morir? Las células de nuestro cuerpo no mueren todas a la vez, sino que lo van haciendo poco a poco. ¿Qué células marcan la muerte?

Una persona en parada cardiorrepiratoria (no respira, no late) sí tiene actividad cerebral. ¿Hasta cuando se considera que está "viva"? Podríamos decir que en el momento de que su encefalograma sea plano (actividad cerebral no detectable). No obstante, gran parte de sus órganos siguen vivos y probablemente también gran parte de sus neuronas.

Quiero traer con esto una reflexión de que quizás el paso de la vida y la muerte no es algo abrupto, sino que es un proceso de "apagado progresivo" que dura más tiempo. Y esto no sirve más que para sumar un poco más de dificultad y descubrir que cuando preguntan en CSI lo de "la hora de la muerte?" en realidad no tiene mucho sentido.

Espero que lo hayáis disfrutado tanto como yo y no haber herido muchas sensibilidades con este tema tan lúgubre. 

Nos vemos en los comentarios. #FelizSábado


sábado, 17 de noviembre de 2018

Neurozapping. Futuro del cerebro: Retos y sueños a cumplir

Hoy estamos de fiesta. No es la primera vez que podemos interactuar con el autor del libro que estamos leyendo pero sí la primera en la que la interacción será tan directa.

Vamos a comentar una charla de José Ramón Alonso en las Ted Talks  2015 en Salamanca.

He tenido la gran suerte de que me tocara abrir los comentarios resumiendo o dando una idea de la charla. Pero lo primero es que la veáis.



Aquí os dejo un breve resumen impregnado de mis interpretaciones para que os sea más sencillo preguntar, aportar otro punto de vista o dudar de algo. Luego pasará José ramón a aportar luz a nuestras dudas y desvaríos.

Debo insistir en que veáis el vídeo, y si ya lo habéis visto insisto en que lo veáis otra vez.

Aquí va mi sesgada visión de la charla:

Después de la introducción, que suele ser (soy fan) para conectar con el público y el evento ya me sorprende de ver cómo el enfoque al futuro parte del pasado.  Nos pone en perspectiva de lo que ya hemos logrado, lo que no hace mucho era el futuro. Y hace hincapié en dos factores que nos hacen ser lo que somos, la creatividad y la conectividad.
Sobre la conectividad nos recalca que tiene si lado oscuro ya que las noticias no nos muestran que estamos en el mejor momento de la humanidad y que las pseudociencias también la aprovechan.
De ahí que él se involucre en redes sociales para aportar un poco de ciencia.
Me encanta cómo remarca la importancia de todos en el ejemplo alrededor de una hoguera.

Comienza a hablar de grandes avances con el "alzamiento" de la especie, el bipedismo que nos permite ver más lejos y cazar en grupo. Para cazar juntos necesitamos comunicarnos y planear, imaginar lo que va a pasar. Sin duda un gran paso adelante.

Sigue con un ejemplo concreto de Neardenthal que vivió mucho con grandes impedimentos físicos por lo que debió ser cuidado y necesitó que los demás compartiesen con él. Seguimos avanzando.

Curiosamente coincidimos en las fechas con la charla ya que ayer fue San Alberto, él nombró los ventrículos del cerebro pero fue Leonardo el que da pie señalar un nuevo avance, la investigación. Seguir buscando y repetir lo que se ha hecho hasta ahora.

Una vez definido lo que nos ha hecho una especie de éxito y situados en el cerebro de forma magistral pasamos a los trabajos actuales. La dificultad de trabajar con tan gran número de neuronas no impide que se vaya dando luz al funcionamiento del cerebro.
Tras unos ejemplos José Ramón nos muestra algunas de los retos que él, y nosotros, desearíamos que se lograsen en el futuro.
Ya nos tiene dónde quería, va explicando cómo sen logrado o estaban en proceso avanzado en el momento de la charla, hace 3 años.  Para no extenderme más solo comento uno... o dos.

Imagen de Vox Populi


Que los tetrapléjicos vuelvan a andar. Yo vi el momento y no me enteré bien. Aquí @aberron nos aclara qué quería hacer y lo que consiguieron.




Imagen de noticiascientificas.info


 El ratón verde no lo puedo dejar escapar.
 Que sea tan sencillo localizar una célula en otro cuerpo me alucina.








Cada día la ciencia nos da noticias importantes y seguimos creando el futuro.

Aquí termina  mi intervención, ahora me voy a los comentarios a preguntar.

Buen finde y mejor semana

Santos

sábado, 10 de noviembre de 2018

Neurozapping. 7) Pokémon y la epilepsia

No he visto ningún episodio entero de Pokémon, pero confieso que tengo instalada la aplicación “Pokémon GO” en el móvil, porque es un juego que te obliga a caminar y, a los que no nos gusta el deporte, eso va muy bien para la salud. Por ello estoy familiarizada con Pikachu, Porygon y otros “monstruos de bolsillo” (que es de dónde viene etimológicamente hablando Pokémon, pues es una contracción de “pocket monsters”), aunque no conocía la historia que nos cuenta José Ramón.


Pues resulta que en diciembre de 1997, en Japón, emitieron un episodio de la serie de anime Pokémon, titulado “Soldado eléctrico Porygon”, que produjo ataques epilépticos, convulsiones e inconsciencia a numerosos niños (685 de los cuales fueron llevados a urgencias) que lo estaban visualizando por televisión.

La secuencia que afectó de esta manera a la audiencia es la siguiente, pero no os preocupeis porque los destellos que podrían alterar a nuestro cerebro aquí están en blanco y negro (y no en rojo y azul como en el original).


Este es el caso más famoso de epilepsia fotosensitiva que existe debido a la gran cantidad de gente afectada. Este es un tipo de trastorno epiléptico en el cual los ataques son causados por estímulos visuales que forman patrones en el tiempo y el espacio. Otros tipos de estímulos que pueden producir este tipo de epilepsia son las luces de las discotecas o las de las sirenas de vehículos de emergencias.

La epilepsia no es una enfermedad, ni mental ni de otro tipo. Y tampoco afecta a la inteligencia o a su normalidad (aunque un estudio de investigadores italianos encontró una respuesta cerebral anormal en las personas que tenían este tipo de epilepsia). Por lo que no existe una cura, aunque esa sensibilidad suele disminuir con el tiempo. Es un trastorno cerebral que puede generar movimientos incontrolados lo que puede producir lesiones y pérdida del conocimiento. Y los tratamientos farmacológicos van dirigidos a reducir la posibilidad de sufrir los ataques.

Lo mejor que se puede hacer cuando te encuentras a alguien con un ataque epiléptico es apartar cualquier objeto que le pueda provocar una lesión, girarle para que pueda expulsar cualquier objeto que tenga dentro de la boca y colocar una almohada debajo de su cabeza.

Después de lo sucedido en Japón un grupo de trabajo llegó a las siguientes conclusiones para evitar que otro caso igual volviera a suceder:
  • Los flashes de imágenes, especialmente las de color rojo, no deben titilar más de tres veces por segundo. Y si no hay rojo no deben hacerlo más de cinco veces por segundo.
  • Las rayas, bandas, remolinos y círculos concéntricos no deben llenar la pantalla.
  • Las secuencias de destellos no deben durar más de dos segundos en total.

Y cómo no, este suceso interesó a los servicios norteamericanos de inteligencia militar, aunque se concluyó que no había pruebas experimentales de que funcionara lo de enviar “pulsos electromagnéticos” contra el enemigo que hicieran que sus neuronas tuvieran disrupciones del control muscular voluntario.

El autor también nos cuenta que el universo Pokémon está formado por numerosas especies presentes en una región ficticia. Muchas de estas especies pueden sufrir una metamorfosis y transformarse en una especie parecida (o no) pero más poderosa en un proceso al que denominan evolución. Personalmente siempre me sorprendió mucho que lo llamaran así, pues es una metamorfosis en toda regla, y didácticamente es un error llamarlo evolución. Por lo que, en mi opinión, los creacionistas, deberían aplaudir que se confunda así a los niños sobre el concepto de evolución, para así poder convencerles más fácilmente sobre “la verdad dictada por Dios en el Génesis” (espero que se entienda la ironía), en vez de criticarla (como algunos grupos de creacionistas norteamericanos han hecho).

También explica algunas anécdotas de cómo ha afectado a la franquicia de Nintendo los incultos bienpensantes que, por ejemplo, ven esváticas dónde tan solo había un símbolo budista tradicional.

En los juegos de Pokémon los niños aprenden una larga lista de nombres, características y propiedades de los monstruos; por lo que siempre me ha parecido una oportunidad mal aprovechada para enseñar a los niños datos reales de nuestro entorno. ¿Qué opináis? ¿Sería una buena idea, útil y exitosa, la de cambiar estos seres inventados, por otros reales? ¿O pensáis que los juegos deben potenciar la imaginación de los niños y dejar la realidad para los estudios y los adultos?

Como he dejado entrever, otro tema que me molesta es que utilicen la palabra evolución para cambios abruptos y nada graduales, y que (tratándose de que los cambios se producen a nivel de organismo -aunque estos sean imaginarios- y no a nivel de especie) la utilitzen en vez la palabra metamorfosis que sería más apropiada. Ello puede producir una confusión gratuita a millones de niños que más tarde se convertirán en adultos incultos si no se les saca del error. ¿Qué opináis? ¿Estoy exagerando?

Aunque he de reconocer que sí que he aprendido alguna cosa jugando a “Pokémon GO”, pues me pregunté porqué habían acentuado la palabra Pokémon al ser llana. Pues bien, no es un acento sino una tilde en inglés. Sí, en inglés. Pues me enteré de esta manera que sí que se utilizan las tildes en el idioma de Shakespeare, pero solo en casos muy raros para indicar que una vocal habitualmente muda, según el sistema fonético ordinario del inglés, sí se pronuncia. Toda la vida pensando que en inglés no existían las tildes y después te enteras de esto :D.

sábado, 3 de noviembre de 2018

Neurozapping. 6) "Mad Men y el donjuanismo"

En la semana de oro de Don Juan Tenorio nos toca tratar este tema, ¿casualidad?
Pues sí, por muy buenos que seamos organizándonos no sabíamos ni que había un capítulo con esta temática. Pero la suerte persigue a los que perseveran y nosotros no fallamos ningún sábado.

El capítulo parte de la serie Mad Men (2007/2015) que  ha recibido numerosos premios y que no conocía de nada. Ya llevo dos pifias en dos párrafos.
El protagonista es un agente de publicidad que crea su empresa y logra el objetivo americano de tener dinero y una familia perfecta. Aunque sus debilidades lo arrastran al desastre familiar y supongo que personal.
Estamos en los años 60, tabaco, alcohol, sexo, homofobia, misoginia, adulterio... decidido, no veré la serie. Realmente el avance de la sociedad deja mucho que desear en demasiados aspectos pero en otros hemos mejorado mucho.

Una vez situados en la serie, José Ramón Alonso enlaza al protagonista con enfermedades relacionadas con el exceso en la relaciones sexuales. No en vano ha tenido la paciencia de contar hasta 17 señoritas distintas pasando por su cama en el principio de la sexta temporada y le quedan 24 capítulos.
Don o Donald (le voy a coger tirria al nombre después de querer tanto al pato), el prota, engaña a su mujer con cuantas mujeres puede y lo mismo hace con la segunda mujer y a las que vengan. De ahí el título del capítulo relacionándolo con el donjuanismo.
Por situar a la audiencia juvenil diremos que El Tenorio es una obra teatral de José Zorrilla protagonizada por un hombre que apuesta sobre las doncellas que puede llegar a seducir.

A este deseo exagerado por mantener actividades sexuales se le llama de muchísimas maneras como habréis leído.  Esta hipersexualidad se puede deber  bien a diversas enfermedades o bien a la ingesta de drogas o medicamentos.

Definido el problema el autor pasa a relatar la evolución de la explicación médica de tener tantas ganas de mover la pelvis. En la antigüedad se pensaba que era un problema de los órganos  sexuales pero con la llegada del método científico se descubrió que el problema residía en el cerebro, 15 siglos después.
En esta parte del capítulo aparecen los frenólogos, más pseucientíficos sacando provecho a lo desconocido. Por poner un ejemplo, estos especialistas decían que las mujeres con la cabeza más grande tenían más deseo sexual.
Destaca como dato que apoya el cambio de visión de la enfermedad el ejemplo de un inglés que en el 1833, tras un golpe en la cabeza, sufrió una satiriasis violenta y perseguía a toda doncella que pasaba cerca.

Llegando ya al siglo XX se consideraba la enfermedad como social, producida por ansiedades y miedos. A partir de 1960 se utilizaba la castración química para tratar a los delincuentes sexuales. Supongo que son fechas españolas o de aceptación mundial ya que todos conocemos el caso Turing que murió unos años antes.

En la actualidad el trastorno se afronta desde tres perspectivas:
- Adicción al sexo, posibilidad rechazada por los psiquiatras
- Trastorno compulsivo, se logra un alivio a corto plazo
- Desequilibrio entre deseo e inhibición relacionado con el lóbulo frontal del cerebro

Finalmente JRA nos crea una duda, ¿qué se considera normal?
Uno de cada 14 hombres, supongo que algo parecido en caso de mujeres cuando deduzcamos el factor "fantasma" de los hombres, tiene orgasmos (sólo o acompañado) una o más veces al día. Algo que, dependiendo de la cultura y la sociedad, podría ser normal. Yo me apunto a excesivo más que a envidiable, seguro que hasta pierde la gracia.

Para terminar nos ofrece una explicación neurobiológica a la enfermedad, este exceso llegaría a acostumbrar a los circuitos neuronales que reforzarían ese comportamiento.
Todavía no hay tratamientos de efectividad reconocida pero lo cierto es que mejoran mucho los victorianos que me niego a reproducir.

Acaba el capítulo con la moda creada por la serie en cuanto a ropa y accesorios que no  respecto a los comportamientos sexuales...de momento.

Un aire sí se traen


Cuestiones para el debate:

1 Feminismo. El Tenorio es un obra muy dentro de las tradiciones de nuestro país, sin embargo es bastante machista. ¿Creéis que debería dejar de representarse?
Al hilo del tema, controversia con Disney

2 Pseudociencias. Curiosamente los frenólogos comenzaron la búsqueda de la localización en el cerebro del problema. Es el primer caso que conozco de que comience una investigación la mano equivocada de la ciencia, ¿creéis que habrá más casos en los que hayan ayudado a la ciencia?

3 Neurociencia. Avanzamos a pasos agigantados en el conocimiento del cerebro pero ¿llegaremos a ser capaces de regular unos circuitos neuronales tan concretos comos los que controlan la sexualidad?


Os recuerdo que tod@s estais innvitados a resumir. Si te animas deja un comentario o contacta con cualquiera de nosotros.

Feliz y calentita semana

Santos