Nos despedimos de La cuchara menguante con el saber agridulce de no haber conseguido enganchar a más gente en los debates pero satisfechos porque nos ha enriquecido mucho.
Vamos con el contenido.
Comenzamos por reflexionar sobre los elementos naturales más raros,los que menos debemos encontrar son los que se desintegren antes. El campeón de velocidad de desintegración es el francio sin embargo encontramos menos ástato (qué susto me he llevado con la tilde, pero también se acepta y es más usado astato). Si hay algo que fascina a los científicos es encontrar algo que no se ajuste a las teorías. Habrá que explicarlo rápidamente. Antes de adentrarnos en el problema debemos asentar una base para las explicaciones.
Ambos elementos se diferencian en sólo dos protones, pero casi 90 protones y más de cien neutrones ocupan demasiado espacio para que la fuerza nuclear fuerte los mantenga unidos mucho tiempo ya que su alcance es muy corto, estamos al límite. Ya sabemos porqué no son estables los elementos pesados, excepción hecha de los que tengan números mágicos como el 92 del uranio o el 114 del flerovio (aunque la magia hace que sea mucho más estable de lo esperado no le llega para aparecer en la naturaleza). Dado que los números mágicos no tienen por qué tener un límite Seaborg propuso la existencia de una isla de la estabilidad de elementos superpesados, el siguiente será el 126. En realidad sí aparece una limitación, para más de 137 protones se esperaría una velocidad para los electrones que giran alrededor del núcleo igual a la de la luz lo que nos lleva a la prohición de superar ese número atómico. (Ampliación de Francis)
Oganessian la representó con una pericia inusual para ser físico nuclear, no encuentro otra explicación a fama de la imagen que aparece en el libro siendo, además, de un tipo que trabajaba en Dubna en lugar de en Berkeley.
Volvamos a nuestro problema de abundancia atómica.
Nos movemos entre elementos radioactivos y las desintegraciones producen otros también radioactivos hasta que la serie desemboca en uno estable terminando el proceso. Las desintegraciones tienen lugar por emisión alfa o beta. La partícula α es núcleo de helio por lo que el núcleo resultante tendrá un número atómico (Z) dos unidades menor, los dos protones que pierde con la partícula α. La partícula β es un electrón que surge del núcleo , proviene de un neutrón que se convierte en protón emitiendo un electrón y un antineutrino electrónico, con esto el núcleo ve aumentada su Z en una unidad por la aparición del protón.
Al fin somos capaces de desentrañar el misterio, las desintegraciones de los elementos transuránidos producen francio, el cuál, en lugar de desintegrarse con emisión α dando lugar al astato prefiere hacerlo con β dando lugar al radio. Las desintegraciones vuelven al camino α, Z varía de dos en dos, de forma que saltan al astato.
La segunda parte del capítulo se centra en la belleza de la propia tabla periódica. Es algo de lo que podemos estar orgullosos, incluso sería una de las cosas que mostraríamos a unos hipotéticos extraterrestres como uno de los logros superiores de nuestra civilización.
No puede el autor volver a loar a Seaborg por ampliar la tabla desde los EEUU.
A continuación abre varios frentes con nuevos átomos de antipartículas, átomos de átomos y otras formas de disponer los elementos en tablas menos cuadriculadas para terminar en todo lo alto con los puntos cuánticos, su descubridor no es nombrado, con aplicaciones en computación cuántica sin necesidad de temperaturas ultrabajas.
Espiral |
Como me parece buena idea os dejo algunas:
Piramidal |
Tipo galaxia |
Juego de mesa |
Exagonal |
Reconocimientos y agradecimientos:
Ante todo quiero dar las gracias a mis allegados que me permiten dedicar un rato el fin de semana a leer y comentar los capítulos.
Vaya mi agradecimiento a nuestro futuro agente.
También quiero expresar mi agradecimiento a los pocos pero magníficos colaboradores de las tertulias.
No quiero olvidar a los lectores silenciosos a los que espero conocer en breve ya sea por comentarios o bien por animarse a resumir con nosotros.
Por último, tengo una especial deuda con de gartitud con Mendeléyev, Meyer, Newlands, Chancourtois, Odling, Hinrichs y otros desarrolladores de la tabla.
Para motivar los comentarios os propongo:
- La frase en la que considera la Tierra "un cósmico error de redondeo" en referencia a la mínima abundancia de los elementos diferentes a H y He
- La hipótesis sobre configuraciones de elementos superpesados que no seguirían las reglas habituales
- El obligado comentario general del libro
Monumento a la tabla |
Feliz semana y próspero libro nuevo
Hola, Santos.
ResponderEliminarGenial el capítulo de reconocimientos (el tuyo). Tengo que agradeceros la buena acogida, a pesar de llegar tarde, como siempre. Sois muy buena compañía.
1. La frase. Me estuve fijando en la facilidad con que saca conclusiones y consecuencias increíbles de afirmaciones ligeras o simples suposiciones. Y recordé una vieja máxima de la lógica, que dice aproximadamente: de lo verdadero sólo se sigue (se deduce, por ejemplo, correctamente) lo verdadero; de lo falso, en cambio, se sigue cualquier cosa. A veces me parece que muchos argumentos son flojos y atrevidos, porque falta profundidad. Lo del error de redondeo es una de esas conclusiones que son impropias de un científico, porque se supone como principio la regularidad, la racionalidad y la intención decidida de comprender.
2. Aquí no sabría decir nada.
3. Aquí en cambio, quizás hablaría de más. Se me hizo un poco pesado, no muy asequible, pero siempre sorprendente. Me enfada en algunas cosas, pero me hace reaccionar.
Pienso que la lectura ha sido una buena navegación y algo he pescado. Y nada de islas, piratas y tesoros, sino un mar abierto e inmenso que recorrer.
Un saludo.
Gracias a tí, Ramiro. Tus puntos de vista enriquecen muchísimo estas tertulias.
EliminarYo entendí como tú la frase del redondeo pero luego al releerlo no creo que lo haya hecho tan mal. Ha querido ser gracioso y se ha pasado de frenada.
Me gusta mucho tu final marinero
¡Hola Santos!
ResponderEliminarGracias por el resumen, muy bueno como siempre :).
Estoy con Ramiro en que tu apartado de “Reconocimientos y agradecimientos” ha estado genial :D.
Sobre la frase en la que considera la Tierra "un cósmico error de redondeo"... A mí (al contrario que a Ramiro) me ha impresionado, y aunque no es exacto, sí que deja patente con ello la poca cantidad de materia que no es ni H ni He. Y si resulta que sólo una pequeña fracción de toda la masa del Universo estaría en forma de materia ordinaria y que el resto es materia oscura... Al final resultará que sí que somos especiales, no somos el centro del universo, ni la razón de la existencia de este, pero sí que vamos a ser una rareza bien rara, al menos a nivel de los elementos de los que estamos hechos y por tanto de la vida basada en el carbono. Y eso estremece por la soledad que representa estar en un ricón de este basto Cosmos, con tan poca similitud con el resto.
Sobre el segundo tema, no se me ocurre nada qué decir.
Y sobre el libro y mi participación... en esta edición de #TertuliasCiencia no he tenido mucho tiempo (sobre todo en comparación a otras). De hecho me he saltado un par de capítulos, de lo cual ya me he reprendido a mí misma :(...
Pero no creo que la falta de tiempo sea la única razón de la poca participación. Pues la mayoría de los capítulos del libro están compuestos de historias, más o menos interesantes, pero cuyo hilo conductor es muchas veces bastante endeble. Sin entrar en que algunos capítulos costaban de leer. Y las vueltas que le daba a algunos temas.
Aunque no puedo decir que el libro me haya aburrido, tampoco se lo recomendaría a nadie.
Lo mejor de todo ha sido vuestra compañía, que en esta edición no he podido aprovechar de forma debida.
¡Hasta la próxima y un abrazo fuerte a todos!
Hola Conxi
ResponderEliminarGracias por no abandonar al no poder seguir el ritmo. A mí me pasó lo mismo. Unos pocos capítulos que pude recuperar en navidad aunque me costó bastante.
Sí que somos algo superespecial, sólo que haya planetas en la inmensidad del vacío y la inmensidad de H-He ya es impactante. Y luego aparece la vida...
Esa soledad pienso que es a razón de que estemos empeñados en que existe vida en otros planetas.
Estoy de acuerdo contigo en el sabor que deja el libro. Un año lo propuse a mis alumnos de Química de 2º Bach y les dejé elegir un capítulo que les gustara para hacer un trabajo. No llega a ser muy recomendable para otros excepto si hablamos de químicos.
Yo también, y seguro que todos, he disfrutado mucho con tus propuestas.
Montones de abrazos
Hola a todos!!
ResponderEliminarMuy buena entrada, Santos, como otras que había leído. Sabes aunar muy bien el resumen del capítulo con el "poso" e impresiones que te deja. También me ha sorprendido tu apartado de agradecimientos. Siempre encontramos agradecimientos del autor, pero nunca del lector. Me apunto a ello para la próxima.
Con respecto a la primera pregunta, también lo he encontrado atrevido o pasado de frenada. No me ha molestado en exceso porque he captado lo que quería transmitir con la rareza de los elementos de forman la Tierra. Pero quizás tiene un toque demasiado "sensacionalista" que raya con el rigor que se supone que deben tener este tipo de libros.
En cuanto a la última parte del libro, personalmente (no soy químico ni físico) me ha dejado un sabor agridulce. Creo que habla de muchas cosas, complejas a las que dedica poco tiempo. Están chulas, pero creo que es difícil sacarle jugo para un lego (como yo). Y este tipo de pasajes narrativos me los he encontrado durante todo el libro, lo que enlaza con la tercera pregunta.
Valoración general: Libro ameno por las historias, anécdotas y personajes que te vas encontrando, pero creo que un libro de divulgación debe tener algo más y, bastantes pasajes cuyo objetivo es la explicación de lo que está hablando los he encontrado poco satisfactorios. Me ha gustado porque he aprendido cosas nuevas y me ha llevado a buscar más información, pero tampoco lo recomendaría. Para mí sería un 6 sobre 10.
Al fin y al cabo, lo hemos disfrutado, aprendido y criticado: El espítiru de una buena tertulia.
Perdonad que en los últimos capítulos el trabajo me ha atropellado un poco y he tenido que leerme los últimos 6 capítulos del tirón, pero me apunto al próximo. Tenemos título ya??
Un abrazo a tod@s
Hola Santos, genial despedida de un libro controvertido.
ResponderEliminarSobre el capítulo decir unas cuantas cosas:
· Me han encantado sus sugerencias sobre la tabla periódica y la educación, desde que las leí tengo una #NotaMental en mi cabeza que dice "explora está idea Juan Carlos".
· Estoy con Conxi en lo de la rareza que somos, de hecho no me llamó la atención la frase "un cósmico error de redondeo". Desde el libro "Orígenes", y como he manifestado ya en alguna ocasión, tengo la sensación de que estamos solos (aunque reconozco que no soy capaz de valorar si estoy sesgado por no ser capaz de procesar la inmensidad del tiempo y del espacio que hay que considerar cuando uno piensa en el Universo).
Con respecto al libro:
Me ha gustado la idea de decir si lo recomendaría o no: Yo no lo recomendaría
Me ha gustado la idea de puntuarlo: Un 6 sobre 10 también le pongo yo.
Y alguna frase que resuma estás notas y recomendaciones:
"Como ya ha dicho, algunas veces lioso, otras veces poco divulgativo, otras veces con historias que yo diría forzadas; pero reconozco que otras historias y conceptos los he conocido gracias a él. Las referencias marineras me han encantado"
Y con respecto a los tertulianos y a los que nos leen:
Sois (somos) geniales. Disfruto mucho con las tertulias. Yo también he sido poco constante, pero aun así me alegro muchísimo de conversar con vosotros: ¡QUE NO DECAIGA LA FIESTA!
Saludos a todos.