sábado, 20 de julio de 2019

Un número perfecto. 7) La Alhambra y las teseladas


Es este capítulo vamos a relacionar entre sí tres cosas tan aparentemente poco conectadas como la Alhambra de Granada, el artista Maurtis Cornelis Escher y las matemáticas.

Es necesario comenzar sabiendo que para cubrir un plano necesitamos figuras de dos dimensiones. Teniendo esto en mente, los únicos polígonos que pueden cubrir a otro en un plano son el triángulo y el cuadrilátero. Sin embargo, la figura más eficiente para cubrir una superficie es el hexágono regular.

Esto se conoce como teselar: un polígono tesela el plano si podemos rellenar completamente el plano (es decir, sin que queden huecos) con copias de dicho polígono que no se superpongan entre sí.

La naturaleza ya ha empleado esta solución en múltiples situaciones, siendo quizás la más conocida la del uso de estas figuras geométricas por las abejas para construir sus panales.


¿Qué relación tiene esto con la Alhambra de Granada?

Lo primero que hemos de saber es que el arte musulmán tiene prohibido representar seres vivos, por lo que a la hora de decorar el palacio real de Muhammad ibn Nasr, primer monarca del reino nazarí de Granada, los artistas emplearon una profusión de teselas y dibujos geométricos.

En 1910, Ludwig Bieberbach demostró que el número de formas diferentes que hay para rellenar un plano con teselas es de 17. Se trata de un problema de cristalografía. Y si bien no tenemos constancia de que los artistas musulmanes conocieran esta hecho, lo cierto es que la Alhambra es el único edificio construido antes del descubrimiento de la teoría de grupos que cuenta con al menos un ejemplo de cada uno de los grupos cristalográficos planos.



Al igual que pasó con la belleza «oculta» de la Alhambra, que no fue valorada en su justa medida hasta su total «compresión»; Maurits Cornelis Escher sorprendió a todos con unas obras donde experimentó con diversos métodos de representar (en dibujos de dos o tres dimensiones) espacios paradójicos mediante figuras imposibles, ciclos, metamorfosis. Asimismo, destacaron sus trabajos sobre la estructura de la superficie y la partición regular del plano (es decir, los patrones que rellenan el plano o teselado, como hemos visto con la Alhambra).

Escher supo, como nadie, unir dos mundos: la innovación artística con teselaciones que van cambiando de forma, con vida propia; y la innovación científica, gracias a conceptos como la metamorfosis, la cinta de Moebius, o las lentes convexas reflexivas.

Puedes ver sus obras aquí: https://www.wikiart.org/es/m-c-escher



Finalmente solo queda que nos fascinemos con las matemáticas.

Actualmente hay 15 pentágonos irregulares que sirven para teselar un plano, el último de ellos descrito hace tan solo cuatro años, tras una búsqueda que comenzó en 1918 con Karl Reinhart.

Lo bonito de este tema es que no se ha demostrado que no haya más, es decir, estamos ante un problema abierto. De hecho, las sospechas apuntan a que esta clasificación todavía está incompleta ya que habría más tipos de pentágonos esencialmente distintos a estos 15 que también pueden teselar el plano.




Las matemáticas y el arte han estado «cogidas» de la mano desde siempre. Del mismo modo, el arte ha servido en ocasiones como estímulo para la investigación matemática. 

Por eso me planteo, en relación con el debate mantenido en los capítulos anteriores, ¿es posible que el sentido artístico, la armonía, el gusto por una obra de arte simétrica, tenga alguna relación con nuestra mente analítica? Es decir, ¿es posible que si vemos una representación artística con pinceladas matemáticas nos pueda parecer más «bonita» o más estética?

9 comentarios:

  1. Hola, José Luís. Me gusta tu resumen, elegante y completo.

    Lo que más me ha gustado del capítulo han sido la consecución de los 17 modelos de teselación que estaban "ocultos" en La Alhambra y la historia de la mujer científica en casa descubriendo 4 formas de pentágonos que otros señores estarían buscando en sus despachos.

    No hay manera, este libro y vuestros debates me parten por la mitad siempre.
    Sí creo que algo simétrico o con pautas sencillas nos parece más bonito por que lo analizamos más fácilmente.
    Y, sin embargo, la sorpresa que te impregna cuando ves una obra de Escher me gusta todavía más.
    Me encanta sorprenderme y por eso veo más bonito un dibujo de Escher que los alicatados, sin dejar de alucinar con lo adelantados a su tiempo que han demostrado ser.

    Esas pinceladas matemáticas me gustan, me encanta resolver un problema con la magia simplificadora de las matemáticas, pero me gusta más sorprenderme.
    Me intriga el caso de los pentágonos, lo miro, observo lo ingenioso de las soluciones, veo e patrón, lo comparo con los otros... magnífico.
    Veo, por ejemplo, el dibujo de los caballos y me brillan más los ojos. descubro más imágenes, peces y pájaros, y mezclados... disfruto.

    Buena semana a todos.

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    1. La verdad es que, como dices, las matemáticas son apasionantes, y cuando entiendes y resuelves un problema es una sensación única de "trabajo cumplido". Quizás por eso llegar a la comprensión de que una obra de Escher, además de arte en sí mismo, tiene mucho de matemáticas, es un placer doble para los sentidos...

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  2. Genial resumen, José Luis

    Voy a ser breve.

    ¿Es posible que si vemos una representación artística con pinceladas matemáticas nos pueda parecer más «bonita» o más estética? Sí

    Hace un tiempo hubiera dicho que NO, pero cada vez tengo más asumido que tenemos respuestas automatizadas (emocionales, procedimentales...) de serie. Sin duda nos ayudaron a sobrevivir y generación tras generación se mantuvieron (evolución). Algunas (imagino que todas) tienen un lado oscuro y nos llevan a errores (sesgos y prejuicios). Posiblemente el orden nos sea atractivo (generalizados, esquematizamos... de manera intuitiva), posiblemente las simetrías nos emocionen positivamente.

    Aunque, como siempre, puede haber gente que por características personales, educativas... (o por ser un buen manipulador y gustarle llamar la atención), se sienta ajeno a esas emociones.

    Saludos

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    1. Es genial este resumen que has hecho JC, donde explicas a la perfección un tema bastante complejo. Es llamativo porque hay personas que tardan una vida en comprender (otras nunca lo hacen) el lado oscuro de nuestras percepciones que suponen los sesgos y prejuicios. Qué mejor sería nuestra convivencia en general si todos fuéramos conscientes de esas circunstancias...

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  3. Estupendo resumen, José Luis.

    Respecto a, ¿es posible que si vemos una representación artística con pinceladas matemáticas nos pueda parecer más «bonita» o más estética? Leí una vez que la simetría facial influye en el caso de la percepción en el atractivo de las personas, supongo que ello podría considerarse como pincelada matemática y una de las respuestas automatizadas que comenta JC. Por lo que mi respuesta a la pregunta sería que, en estos casos, sí.

    Y digo en estos casos porque se me hace algo complicado encontrar representaciones que no se puedan describir, en absoluto, de forma matemática, por ello no encuentro ejemplos de que una supuesta falta de esas pinceladas matemáticas, hagan de ello algo menos bonito... Mi problema está en que no sé qué no se puede describir matemáticamente, y por tanto (si no hay ninguna representación que no se pueda en absoluto) cualquiera tendría esas pinceladas matemáticas a las que haces referencia...

    No sé, creo que tu pregunta me va grande XD.

    Soy fan de Escher. Cuando lo descubrí, me enamoré de su obra. ¿Son las pinceladas matemáticas de su obra lo que me atrae? No lo sé. Sí que tengo claro que su originalidad y la sorpresa que me producen muchos de sus dibujos forma parte, para mí, de su atractivo.

    ¡Que tengáis una feliz semana!

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  4. Esta frase me ha dejado pensando:

    "se me hace algo complicado encontrar representaciones que no se puedan describir, en absoluto, de forma matemática"

    ¿Es posible que todo arte tenga descripción matemática? ¿Alguno sabéis más sobre esto?

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    1. No soy una experta (pues mi campo, en informática, está muy alejado), pero la renderización, que crea o genera imágenes por ecuaciones o cálculos matemáticos, que se utiliza en computación (y -por ejemplo- es la base de la mayoría de los juegos de ordenador), es capaz de reproducir (o acercarse a su reproducción) a cualquier obra de arte. Por eso no encuentro representaciones que no se puedan describir, en absoluto, de forma matemática.

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  5. Estupendo resumen José Luis... y muchas gracias por el enlace donde habla de los alicatados... ayuda un poco más a la comprensión. De hecho, no habéis echado en falta algún dibujo en el capítulo para ayudar a entender los distintos tipos de teselaciones con polígonos regulares? Por poner un poco de crítica, jajaja.

    Con respecto a la pregunta que planteas, creo que también me viene un poco grande. Como dice Conxi, no tengo claro ahora mismo si existe alguna representación gráfica que no sea puede describir matemáticamente. Pero si es cierto que la belleza va ligada a la simetría, está claro que veremos bonito aquello en lo que, además de poder ser descrito matemáticamente, seamos capaces de ver patrones, repeticiones, el mismo motivo rotado o trasladado... en definitiva, eso son las teselaciones, ¿no?

    Me da la sensación que lo que hace bonito tanto a estos alicatados como a la obra de Escher (apuntad por aquí a otro fan) es el hecho de que en su obra observamos esos patrones repetidos que, en conjunto, tienen coherencia e historia (en el caso de Escher).

    Me echa humo la cabeza con esto de las teselaciones...jajaja. Fascinantes las matemáticas. Un abrazo a todos y seguimos en el debate.

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  6. Wikipseudociencia es un fraude https://andreslazocruzatt.wordpress.com/2021/04/11/gerardo-garcia-averak-mandalorian/

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